Sígueme si quieres, pero recuerda que yo tampoco sé el camino...

Vistas de página en total

domingo, 13 de febrero de 2011

y los 14 de febrero enviarte mil flores.

Hoy ha sido un día raro. Por una parte, tal día como hoy hace tres años, vi a David por segunda vez. Me costó muchísimo conseguir entrada. La persona que compartió conmigo esa hora y media de risas, canciones y lágrimas, ahora a penas forma parte de mi vida. El tiempo pasa y no perdona, te arranca de tu vida a personas que creías indespensables. Aunque al final te das cuenta de que en realidad no lo eran tanto. Con el tiempo, cada uno sigue su camino, y, aunque siempre has sabido que los amigos del colegio no duran para siempre, cuando llega el momento en el que desaparecen no puedes evitar sentir cierta tristeza. Tantos años vividos, tantos momentos, tantas noches en la misma habitación, tantas confidencias... que al final se quedan en recuerdos. Recuerdos que, te sacan alguna que otra sonrisa cuando menos te lo esperas. Son imágenes perdidas en tu memoria que, sin que seas consciente, a veces reaparecen mezclando nostalgia con felicidad. Al fin y al cabo, la vida se compone de momentos acumulados, dispuestos a ser rescatados cuando hagan falta.




Por otro lado, está él. ¡Aún me parece raro admitir ésto! Pero sí, me gusta mucho, muchísimo. He llegado a mi casa de pasar el día entero con él y a los 3 minutos ya lo echaba de menos. Mi corazón se encoje hasta hacerse muy muy pequeñito. A veces hasta me cuesta respirar cuando pienso en él. Me tiemblan las piernas, y mis manos me tientan a coger el teléfono y llamarle para oír su voz. Cuando estoy a su lado, me gusta imaginar que entre nosotros hay algo más, que ésto que siento es recíproco... pero claro, todo tiene su lado malo: cuando juego a éso, tengo que contenerme para no soltarle un te quiero cuando nuestras miradas se cruzan. Y es que no hay nada que me transmita más seguridad y tranquilidad que sus ojos. Supongo que ésto es lo que la gente llama estar enamorada. Es muy probable. Y a medida que voy aceptándolo, me veo más segura de mí misma y más capaz de convertirme algún día en la dueña de esos ojos que tantas sonrisas me roban diariamente. En serio, ¿no te das cuenta de lo bien que quedamos juntos? Porque yo, siento constantemente que me queda perfecta la vida contigo. Que eres lo que tanto tiempo llevaba buscando. El problema es que me empeñaba en buscar demasiado lejos, cuando lo que necesitaba lo tenía delante de mis narices. Reaciona, abre los ojos: puede que tengas delante de ti a la persona que más va a quererte en toda tu vida.

1 comentario:

  1. Tía me encanta! Me encantan tus reflexiones en voz alta.
    Respecto a la primera... tan solo quiero decirte, que sí, que las cosas cambian. Y la gente también. Pero que eso no pasa si nosotros no queremos.
    A veces es muy dificil echar marcha atrás o aceptar según que cosas, pero sábes, nunca es tarde. Y quizás no esté todo perdido.
    Con ello solo quiero decirte, que te rodees de quien tú quieras y tengas en tu vida a quien desees. Y si perdiste una relación y la echas de menos. NUNCA ES TARDE para intentar recuperarla. Yo siempre lo digo, y es verdad "en ocasiones llega alguien a tu vida con quien te das cuenta de que conectas de verdad, y cuando eso pasa, tienes que luchar por conservarlo. COmo sea!" ;)

    Y respecto a la segunda.... tía no sabes lo identificada que me siento contigo. Te diría que se lo dijeras claramente. Seguro que te lo han dicho más de una vez.
    Pero yo misma soy incapaz de hacerlo... así que mi consejo es, que disfrutes al máximo cada segundo con él, sé siempre tú misma a su lado... y si es recíproco, todo se verá muy pronto :)
    ánimo y suerte :)

    ResponderEliminar